jueves, 30 de abril de 2020




Algunas veces nos ponemos a pensar que las cosas que están pasando a nuestro alrededor es culpa de los demás, culpamos al gobierno, a los políticos en fin a cualquiera que esté en puestos gubernamentales. No analizamos lo que en verdad nosotros estamos haciendo. En estos momentos de confinación donde un enemigo invisible atacado a la humanidad seguimos igual culpando a todo aquello que está o tienen puestos o cargos altos.

Los tiempos no han sido fáciles y a mi parecer nunca lo han sido independientemente del gobierno que haya pasado. Recordando un poco la historia nos cuenta que no todos los gobiernos han sido buenos, eso hablando en el caso de Venezuela. Siempre ha habido los altos y los bajos, gobiernos que pasaron y quizá no dejaron nunca nada. Pero igual el país siempre ha salido adelante, la gente siempre ha buscado la manera de surgir ante la adversidad. Solo aquellos que se centran en cómo salir adelante en medio del torbellino en el cual estamos sometidos logran conseguir la fórmula secreta para mantenerse a flote o en pocas palabras "sobrevivir" como dicen muchos.

Hace unos días en un video chat con unos amigos surgieron como cinco teorías conspirativas los cuales me dejaron asombrado. Es probable que haya algo de cierto en todas, pero en estos momentos es estúpido poner nuestra atención en eso, pero lo que más me llamaba la atención aparte de todas estas teorías era la manera como se expresaba cada uno. Mis amigos que están fuera de Venezuela hablaban de que ahora con todo esto que pasó pues es imposible vivir en Venezuela, que todo lo que se piense hacer para emprender debería ser en otro país, cosa con la cual estoy totalmente en desacuerdo, ya que con todo y la situación actual y eso que acá en Venezuela todavía hay muchas oportunidades, es cierto que hay muchas cosas que mejorar y muchas cosas que deben cambiar pero esas cosas generalmente corresponden a nosotros mismos. Es cuando cambiamos que toda nuestra realidad cambia, en pocas palabras obtenemos y somos lo que pensamos... Parece algo absurdo que tenga que ver solamente con pensamientos pero desde allí es de donde nace nuestro mundo. Cualquier idea cualquier acción, cualquier cosa que queramos hacer, más en lo personal ya sea buena o mala, si desde que despierto mi pensamiento está centrado en lo que no tengo, en lo que me hace falta, pues día a día obtendré siempre lo mismo "carencia", y mientras más lo repitas tú vida estará llena de eso.

Yo intervine en la conversación luego que terminaron de hablar al respecto de lo imposible que es invertir y vivir en Venezuela, y desde mi punto de vista, que a pesar de la crisis todavía hay mucha gente invirtiendo y viviendo aquí en Venezuela, es cierto que la migración ha sido bastante masiva pero debes reinventarte. Hoy en día durante esta cuarentena en la cual hemos estado confinados, he visto como los comercios sean reinventado sobre todo los de venta de comida e insumo de consumo masivo en la cual se realiza la venta con envíos hasta la puerta de tu casa y servicios los cuales tú mismo los buscas. Mucho de esos comercios no contaban con ese servicio, pero se vieron en la necesidad de hacerlo para continuar operando, es decir no cerraron la puerta y dijeron que aquí no se puede. Mis amigos se mantuvieron en silencio, yo continué hablando y les comenté la analogía a la que siempre hago cuando tocan un tema al respecto, les hable sobre los pensamientos que pasan por las personas cuando despiertan, les pregunté: ¿Por qué creen ustedes que los ricos son cada vez más ricos y los pobres son cada vez más pobres?, las respuestas fueron casi de inmediato, que si los ricos nacen ricos, que si los ricos han robado o que si los ricos son los dueños del mundo, que los pobres no estudiaron, que los pobres son marginados, que los pobres son los esclavos de los ricos. Yo en verdad reí, primero por las respuestas que fueron sinceras por lo rápido que respondieron, y después por ver que en verdad aún no se han dado cuenta del porqué de las cosas. Le dije que la respuesta era sencilla "los pensamientos"… No hablemos de una persona pobre, hablemos de una persona con carencia, que vive del día a día, esta persona al momento de abrir sus ojos en la mañana en su pensamiento están las siguientes preguntas: ¿Que voy a comer hoy?, ¿Podré conseguir trabajo? aparte de eso las siguientes afirmaciones: "No tengo dinero", "Está muy caro", "No puedo pagarlo" y así continúa, a medida que va pasando el día se mantienen esos pensamientos en su mente, en pocas palabras recibe más de lo mismo. No hablemos de una persona rica, hablemos de una persona adinerada, ese tipo de personas desde que despierta lo que menos le preocupa es lo que va a comer, desde que se toma el primer sorbo de café en la mañana sus preguntas son las siguientes: ¿Cómo hago para hacer más dinero?, ¿En qué puedo invertir mi dinero?, ¿Cómo hago que mis negocios sean más prósperos?, Sus afirmaciones, generalmente son: "Soy el mejor en los negocios", "Nunca me falta el dinero", "Soy próspero y el dinero me llega en abundancia". Dos formas de pensar muy distintas, dos realidades de vida muy distintas, pero en resumidas cuentas cada uno obtiene lo que tiene en su mente.

Le dije a mis amigos que no me hicieran caso a mí porque a fin de cuentas como bien lo dice la Biblia nadie es profeta en su tierra pero los invité a que leyeran los perfiles de muchos grandes empresarios y millonarios los cuales la mayoría de ellos empezaron sin dinero, pero todos tienen una cosa en común, que pensaban que podían lograrlo y que podía tener éxito y no desistieron hasta lograrlo. En los momentos de crisis es cuando nacen las grandes ideas, no es fácil superar quizás cosas tan fuerte como la muerte de un ser querido, la pérdida de un negocio o algo que para nuestra mente no tenga reparo, pero tenemos que tener en cuenta que en estos tiempos o cuando ocurre algo así hay que vivirlo, hay que sentirlo, pero también hay que dejarlo ir, no podemos vivir con un luto eterno, no podemos mantener una aflicción eterna por algo que perdimos, cuando las cosas se ponen difíciles no es el tiempo para llorar, debemos concentrarnos y estar pendiente de las oportunidades o retos que la vida nos pondrá. Para mí cuando las cosas se ponen difíciles o pasamos por cosas como la que estamos pasando en estos momentos hay dos tipos de personas: "Los que lloran" y "Los que venden pañuelos". Yo le pregunté a mis amigos: ¿Cuantos pañuelos quieren?
Reflexionemos y tengamos pendiente lo que pasa por nuestra cabeza, esos pensamientos que siempre tenemos ya sean buenos o malos, es cierto, es difícil controlar los pensamientos, pero hay muchos métodos para tratar de controlarlos, eso sería tema para algo un poco más extenso, sin embargo los invito a que en la medida posible incrementen sus pensamientos positivos y verán como todo les empieza a salir mejor.
Feliz día...
AOR


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